Junto con otros integrantes del ayuntamiento, fueron citados a la Dirección de Gobernación para exigirles la inmediata destitución del acosador, pero alcaldesa lo defiende con su vida
Alexxa Carrasco
Ante la aberrante actitud asumida por el secretario del ayuntamiento de San Pablo del Monte, Alejandro Martínez Sánchez, al descubrirse que enfrenta varias denuncias públicas por el delito de acoso sexual y laboral, una de ellas también por acoso laboral y despido injustificado de una secretaria que se negó de forma rotunda a acceder a sus propuestas indecorosas, la tarde del pasado lunes, dicho funcionario junto con la presidenta municipal, Ana Lucía Arce Luna, entre otros integrantes del ayuntamiento, tuvieron que comparecer ante la Dirección de Gobernación para explicar lo ocurrido.
En dicha reunión, la postura del gobierno estatal fue clara, la inmediata destitución del funcionario acosador, pues resulta vergonzoso que pese al actuar que ha tenido todo este tiempo y pese a incurrir en una ilegalidad al permanecer en este cargo, solo propiciará una inestabilidad mayor a la que ya prevalece en esta comuna.
Más aún cuando el propio Centro de Justicia para las Mujeres del Estado de Tlaxcala, tuvo que emitir una orden de protección a favor de la víctima Karla N., así como una orden de restricción en contra del funcionario mejor conocido como “La Hamburguesa”, para evitar acercarse a su domicilio, lugar de trabajo o lugares que frecuente, bajo el apercibimiento que en caso de incumplimiento, se hará acreedor a una sanción administrativa o su arresto hasta por 36 horas.
Pese a las pruebas existentes y por increíble que parezca, la presidenta municipal, Ana Lucía Arce Luna, asumió un actitud de cerrazón y por razones que no supo expresar, simplemente se aferró a mantener a Alejandro Martínez en su cargo, pues dijo no estar dispuesta a destituirlo, así se lo pida la propia presidenta de México.
La comparecencia concluyó sin acuerdos, debido a la actitud asumida por la alcaldesa ecologista, quien ignoró por completo a los representantes de la Dirección de Gobernación, quienes tuvieron que quedarse sin palabras ante la actitud de la originaria de San Isidro.