En un claro ejemplo de su nepotismo, Adrián Daniel cobra en el Poder Judicial y todavía recibe un salario como director del Centro Recreativo y Atención de Adicciones; la dirigente sindical todavía lo defiende
Alexxa Carrasco
Una verdadera ofensa no solo para los agremiados del Sindicato “7 de Mayo”, sino para los tlaxcaltecas en general resulta el abuso en que han incurrido la dirigente de este gremio, Karina Erazo Rodríguez, quien pese a que su hermano ya se encuentra detenido por el presunto delito de narcomenudeo, continúa cobrando un doble salario cuando en ninguno de los dos espacios ha laborado.
Acostumbrados a infringir las leyes por el poder que aseguran tener al ser parte del gobierno estatal, la familia de Pedro Erazo Rivera y Guadalupe Rodríguez Guzmán lograron imponer a su hija Karina Erazo Rodríguez como líder del sindicato “7 de Mayo” y una vez logrado ese cometido, esta familia de inmediato recurrió al abuso de confianza y por enésima ocasión se dedicó a beneficiar a sus vástagos.
Y es que, en el caso de Adrián Daniel N., detenido esta semana por el delito de narcomenudeo, cobra un doble salario hasta el momento, pues desde la llegada de su hermana, fue comisionado para realizar labores sindicales y alejado de su área de trabajo como jefe de sección en el Juzgado de Control y de Juicio Oral del Distrito Judicial de Guridi y Alcocer, de donde percibe un salario de 23 mil pesos mensuales, mientras que como director del Centro Recreativo y Atención de Adicciones del Sindicato “7 de Mayo”, percibe una cantidad superior, aunque se han negado a transparentar esta información con el apoyo del presidente del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales (IAPTlax), Arturo de Casa Vega.
En suma, los Erazo Rodríguez mantienen a su hijo con ingresos promedio de 50 mil pesos mensuales sin que realice ninguna actividad, pues la mayor parte del tiempo se la pasaba en su negocio de Chiautempan, donde finalmente, hace unos días las fuerzas federales desmantelaron su tiradero de drogas y cuya propiedad es de sus padres.
Adrián Daniel N., fue detenido el pasado martes junto a otras tres personas en Chiautempan por el probable delito de narcomenudeo y ahora las historias que han empezado a circular en torno a esa persona son de película, pues amigos y conocidos aseguran que Adrián Daniel N., es un narco satánico y que al parecer le gustaba drogar a jovencitas para aprovecharse de ellas.
Era tanta su devoción al diablo que, aseguran, viajaba a la Ciudad de México para adquirir estampas y ciertos materiales para seguir sus ritos. Incluso llegó a visitar la cueva del diablo localizada en Catemaco, Veracruz, para demostrar su fervor.
