En el Informe de resultados de la Revisión y Fiscalización de la cuenta pública 2019 del Órgano de Fiscalización Superior (OFS), detectaron que los regidores integrantes de los ayuntamientos son poco productivos y representan una carga para el erario público, pese a que reciben jugosos salarios como representantes del pueblo.
Los resultados que ofrecen quienes de manera colegiada constituyen la principal autoridad del Municipio deja mucho que desear, pues ante las autoridades de fiscalización no es comprobable su trabajo durante el ejercicio de sus funciones.
En reciente declaración la titular del OFS, María Isabel Maldonado Textle, comentó que tras la evaluación fue detectado que en 35 municipios no se acreditó la presentación de propuesta hechas por los regidores en las sesiones de Cabildo ni en las comisiones instaladas. El restó justificó el trabajo de los funcionarios municipales, pero no tuvieron como comprobar.
En contra parte y con las reformas aprobadas por integrantes de la LXIII Legislatura a la Ley Municipal para el Estado de Tlaxcala, los regidores deberán de acreditar su trabajo y desquitar el sueldo que perciben.
Respecto de las atribuciones de los regidores, éstos deberán presentar un programa operativo anual que deberá ser aprobado por el cabildo, tendrán que presentar un informe semestral de sus actividades de gestión y el estado que guarden los asuntos de cada comisión que se le hubiese conferido, y deberán visitar, cuando menos una vez cada 30 días, las colonias, barrios, delegaciones, fraccionamientos, ejidos y comunidades, para conocer los problemas sociales e intentar solucionarlos.